Cappro: Urge mayor impulso de políticas agroindustriales y reducir la capacidad ociosa
El presidente de la Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro), Raúl Valdez, advirtió sobre la urgente necesidad de implementar políticas agroindustriales que permitan reactivar la capacidad ociosa del 30% al 40% existente en el sector industrial paraguayo. Enfatizó que la coyuntura actual, marcada por la baja en los precios internacionales de la soja y una menor exportación de granos, vuelve a poner en evidencia la dependencia del país de las materias primas sin procesamiento.
Raúl Valdez explicó que el impacto negativo en los ingresos del país responde a dos causas principales, el precio internacional y el menor volumen enviado al exterior. El titular de la Cappro señaló que, aunque algunos subproductos tuvieron un mejor desempeño en términos de cantidad, no lograron compensar las pérdidas por el precio internacional. “En cuanto a harina y aceite, ha crecido en volumen, pero ha disminuido en términos de divisas por los precios internacionales”, comentó.
Según Valdez, esta situación deja en evidencia una debilidad estructural en la economía nacional. “Esto desnuda la falta de las políticas industriales y la vulnerabilidad de nuestro país al ser exportador nato de materias primas sin procesamiento”, advirtió.
El líder gremial insistió en que Paraguay continúa dependiendo en exceso de los factores externos y de las coyunturas globales, lo que limita la estabilidad económica. “Como dependemos tanto de esas coyunturas regionales y globales, estamos hoy en día afectados en ese ingreso de divisas que afecta a la economía nacional”, sostuvo.
IMPULSO A LA INDUSTRIALIZACIÓN
Valdez recordó que la soja tiene un peso fundamental dentro del Producto Interno Bruto (PIB) paraguayo, por lo que cualquier variación en sus precios o volúmenes exportados tiene repercusiones amplias. “Por la importancia que representa la soja dentro del componente del PIB”, explicó, “cualquier baja en el ingreso de divisas golpea directamente a la economía nacional”.
En este contexto, el profesional consideró que el momento actual es propicio para impulsar un viraje hacia una economía más industrializada. “Por ende, es un buen momento para destacar la importancia de la industria”, afirmó con énfasis.
El presidente de la Cappro recordó que la industria nacional trabaja con una capacidad ociosa preocupante. Estimó que entre un 30% y un 40% de la infraestructura industrial disponible no se utiliza plenamente, lo que representa una pérdida de oportunidades para el país.
Para revertir esta situación, Valdez abogó por una política pública coherente que promueva la agregación de valor en origen. “Es importante que a través de los productos industrializados se agregue valor y se pueda mitigar toda esa coyuntura y todos esos factores de volatilidad global”, expresó.
El titular del gremio explicó que aumentar la industrialización no solo permitiría estabilizar los ingresos del país, sino también fortalecería la generación de empleo y la competitividad.
UNA OPORTUNIDAD A LA VISTA
A su criterio, Paraguay debe dejar de depender exclusivamente de las exportaciones de granos sin transformación, y pasar a convertirse en un exportador de bienes procesados, más resistentes a los vaivenes del mercado. “Tenemos capacidad instalada, tenemos energía, tenemos materias primas; lo que falta es una política industrial clara que incentive la inversión y la transformación local”, manifestó Valdez.
El dirigente sostuvo que la coyuntura actual debe ser interpretada como una oportunidad. Si bien los precios internacionales no dependen del país, sí se puede decidir cómo aprovechar mejor los recursos internos. “Industrializar no es solo una cuestión económica, es una decisión estratégica”, indicó. “Significa apostar por un modelo de desarrollo sostenible, que genere valor, empleo y estabilidad”.
Valdez lamentó que la falta de previsibilidad y de incentivos concretos haya frenado proyectos de inversión en los últimos años, especialmente en el área de procesamiento de granos. El presidente de la Cappro señaló que la experiencia internacional demuestra que los países que han desarrollado su industria agroalimentaria son los que han logrado mayor estabilidad y competitividad en los mercados.
“Otros países de la región ya entendieron que no se puede depender solo de los precios de los commodities”, expresó. “Nosotros debemos dar el paso hacia una economía más diversificada y con mayor valor agregado”. Además, destacó que el aprovechamiento de la capacidad ociosa podría tener un impacto positivo inmediato en el empleo. “Cada planta que vuelve a operar a plena capacidad genera más trabajo, más exportaciones y más divisas”, apuntó.
VENTAJAS
Valdez insistió en que Paraguay tiene ventajas naturales —energía limpia, materia prima abundante y una ubicación estratégica— que deberían ser utilizadas para atraer inversiones industriales. “Tenemos todo para hacerlo, pero necesitamos una política de Estado que priorice la industrialización como motor del crecimiento”, remarcó.
El dirigente agregó que la articulación público-privada será fundamental para lograr este objetivo. “El sector privado está listo para invertir, pero se requiere un acompañamiento desde el Estado con reglas claras, infraestructura y financiamiento competitivo”, señaló. También subrayó la importancia de fortalecer la educación técnica y la formación de mano de obra calificada. El dirigente sostuvo que el aumento del valor agregado permitirá al país obtener mejores precios, mayor estabilidad y una distribución más equitativa de la riqueza.
Fuente: 5Días, https://5dias.com.py/article/cappro-urge-mayor-impulso-de-polticas-agroindustriales-y-reducir-la-capacidad-ociosa